Pese a la neutralidad característica de Suiza, sus últimos movimientos parecen haber equilibrado la balanza en un sentido que no ha gustado al imaginario colectivo.
Cada vez más alejado de una OTAN cada vez más unida y cuyos máximos representantes se reunirán en Madrid la próxima semana, el país helvético sigue manteniendo relaciones comerciales con Moscú, tanto es así que ha dejado a un lado las sanciones impuestas por parte de la Unión Europea y de Estados Unidos, y habría adquirido hasta tres toneladas de oro para destinarlas a la fabricación de joyería.
Cabe recordar que Suiza está fuera de lo que podemos considerar como la facción 'occidental', lo que le ha llevado a sortear todos los obstáculos y a conseguir los 3.000 kilogramos de oro, siendo la primera operación de este calibre desde el inicio de la invasión, tal y como apunta la agencia Bloomberg.
Se disparan los rublos
Pese a que la moneda rusa estaba totalmente en declive, esta acción por parte de Suiza ha hecho se la divisa se dispare hasta límites insospechados, tanto es así que habría alcanzado al momento de escribir estas líneas máximos en prácticamente una década.
Por su parte, si atendemos a los datos de la Administración Federal de Aduanas de Suiza, la operación no es reciente, sino que se realizó el pasado mes de mayo, siendo esta la primera operación desde febrero.
El pedido no es para nada pequeño, ya que equivale al 2% de las importaciones de oro en la refinería suiza, y es que las normas no prohíben que éstas procesen el metal ruso, teniendo en cuenta siempre que Suiza y sus cuatro refinerías -que han negado en un primer momento la transacción-, manejan dos tercios del oro del mundo.
