En esta ocasión nos desplazamos hasta Reino Unido para poner el foco en su costa este, en concreto en Norfolk.
La historia comienza con dos hombres que se dedican a buscar metales, encontrando una valiosa moneda en el campo en el que ahora se han hecho más hallazgos.
Esa sería la primera de las 11 piezas con las que se han topado unos agricultores de la zona, que tras varios años arando la zona se han topado con estos tesoros y, advierten: "podría haber más".
Los expertos señalan que las monedas se enterraron entre el siglo I a. C. y el siglo I d. C., aunque pudieron ser acuñadas mucho antes de que los romanos llegaran a Gran Bretaña, invadida en el año 43 d. C. por el cuarto emperador de Roma (Claudio).
El tesoro en cuestión, tal y como señalan diversas autoridades en el campo, pudo haber formado parte de una ofrenda a los dioses, aunque otra teoría apunta a que las monedas se enterraron con el fin de recuperarlas en un futuro.
Monedas diferentes
Se han hallado dos tipos diferentes de monedas: en uno aparece el retrato de Augusto César, en una de las caras, mientras que en el reverso se encuentran sus herederos, sus nietos Cayo y Lucio.
En cuanto al otro, representa a Augusto de perfil en una de las caras, y en el reverso también aparece pero con Gaius a caballo.
Cada una de ellas presenta una pequeña muesca en la parte superior, es decir, alguien probó la pureza de las monedas sin saber que las 11 piezas en la actualidad podrían valer más de 25.000 dólares, aunque ahora se encuentran bajo el resguardo del Museo Británico.