ND© El próximo 15 de octubre el Ufficio Filatelico e Numismatico de la Cittá del Vaticano emitirá una moneda conmemorativa de 10 euros en plata dedicada a la “50 jornada Mundial de Oración por las Vocaciones”, que ha sido acuñada por el Istituto Poligrafico e Zecca dello Stato (Casa de la Moneda de Italia, Ceca de Roma), según diseño de Chiara Principe y grabado de Uliana Pernazza.
La moneda de 10 euros de valor nominal ha sido acuñada en la Ceca de Roma, en plata de 925 milésimas, calidad proof, con diámetro de 34 mm., peso de 22 gr. y con una tirada de 5.999 ejemplares.
El reverso de la moneda muestra a un joven recogiendo las mieses de un trigal, imagen que representa simbólicamente el pasaje del evangelista Mateo “Entonces dijo a sus discípulos: La mies es mucha, pero los obreros son pocos! Rogad, pues, al Señor de la mies que envíe obreros a su mies” (Mt 9, 37-38). La leyenda del país emisor “Citta del Vaticano” (Ciudad del Vaticano) y el valor nominal “10 Euro” completan el diseño.
El anverso reproduce un retrato del Papa Francisco, con su ya característica sonrisa, rodeado por la leyenda “Franciscvs PP. AD. MMXIII. S. P. I”. Sobre el hombro derecho aparece el nombre de la diseñadora “C. Principe” (Chiara Principe).
Sobre el canto liso de la moneda aparece grabado el lema del Pontífice “Miserando Atque Eligendo + MMXIII +” (Lo miró con misericordia y lo eligió 2013).
El lema episcopal de Jorge Mario Bergoglio es la frase latina del Evangelio de Mateo “Miserando atque eligendo”, que describe la postura de Jesús hacia el publicano (considerado un público pecador) que dice “lo miró con misericordia y lo eligió”.
Jesús vio a un hombre, llamado Mateo, sentado ante la mesa de cobro de los impuestos, y le dijo: “Sígueme”. Lo vio más con la mirada interna de su amor que con los ojos corporales. Jesús vio al publicano, y lo vio con misericordia y eligiéndolo, (miserando atque eligendo), le dijo Sígueme, “Sígueme”, que quiere decir: “Imítame”. Le dijo “Sígueme”, más que con sus pasos, con su modo de obrar. Porque, quien dice que está siempre en Cristo debe andar de continuo como él”. San Beda el Venerable, presbítero; Homilía 21.
