El 14 de agosto de 2015, el SNB anunció que comenzaría a emitir la nueva serie de billetes en Suiza en abril de 2016. El nuevo billete de 50 francos será presentado al público por primera vez en una conferencia de prensa el 6 de abril de 2016, y la fecha de emisión será la del 16 de abril de 2016. Una campaña de información a gran escala va a informar al público en general acerca del nuevo billete y las formas de comprobar su autenticidad. La actual serie de billetes, la octava, seguirá siendo de curso legal hasta nuevo aviso. La fecha en la que la serie actual se debe retirar de la circulación también se dará a conocer con suficiente antelación.
La nueva serie de billetes suizo ha tenido muchos retrasos y dificultades durante su producción, tras el concurso público de diseño que ganó la artista Manuela Pfrunder.
Este billete de 50 francos es el primero de la novena serie, que también incluirá efectos de 10, 20, 100, 200, y 1.000 francos, en sustitución de la octava serie, introducida entre 1995 y 1998.
Los diseños para la nueva serie se hicieron públicos en 2005 después de una competición entre los artistas, con la intención de ponerlos en circulación a partir de 2010. Las características de seguridad hasta ahora sin revelar crearon un serio problema similar al que se encontró Washington con el billete de 100 dólares. El Banco Nacional de Suiza citó en su momento “problemas técnicos inesperados” para retardar la emisión de los billetes, que fueron impresos en LandQart, una empresa de propiedad privada canadiense con sede en la ciudad de Landquart, Cantón de los Grisones. La firma tuvo dificultades para producir papel de la calidad adecuado en una base consistente.
La nueva serie es obra de la artista gráfico de Zürich Manuela Pfrunder, ganadora en segundo lugar de la competencia del banco. A diferencia de la serie actual, la nueva emisión no tiene imágenes de personas famosas de Suiza.
El billete de 50 francos muestra una montaña y excursionistas en su cara y una imagen del sol en el reverso.
Los diseños ganadores del concurso público fueron realizados en principio por el diseñador gráfico Manuel Krebs de Zürich, quien es muy conocido por sus tipos de letra. Sus billetes propuestos incluían dispositivos tales como embriones, células sanguíneas, un esquema del sistema circulatorio humano, mapas, y el sistema solar.
El banco abandonó la propuesta de Krebs después de una protesta pública en la que se citó la palabra “horrible” más de una vez.
Los billetes, que están diseñadas para durar al menos 15 años, tras el fracaso anterior, han sido impresos por la empresa Orell Füssli, creada en Zürich para el banco central.