La subasta en sala número 145 de la firma Vico se inicia con Hispania Antigua, para continuar con Grecia Antigua, República Romana, Periodo Julio César a Augusto, Imperio Romano, Imperio Bizantino, Reino Visigodo, Reinos de Castilla y León, Corona de Aragón, Reyes Católicos, Austrias, Borbones, Centenario Peseta, Guerra Civil, Estado Español y monedas extranjeras, desde Afganistán a Zaire.
Se inicia esta reseña en Hispania Antigua, con Bolskan-Osca, y el lote 71 correspondiente a un denario, auñación de Cn. Domitius Calvinus. A/ Cabeza barbada a der.; OSCA. R/ Símpulo, aspérgilo, hacha y apex: DOM. COS. ITER. IMP. AR 4,02 g. I-1923. VILL-213/1. Algo descentrada. EBC. Muy escasa. Salida y remate en 1.400 euros.
Según relata el catálogo de la subasta 145 de Jesús Vico S.A:, Cneo Domicio Calvino hizo su carrera política en los años 50, tribuno de la plebe en el 59, pretor en el 56 y por fin cónsul en el 53, aunque su acceso a este puesto ocasionó un gran escándalo por haber sobornado a los cónsules del año anterior, lo cual le obligó a abandonar la vida política y a exiliarse al acabar su mandato. Reaparece durante la guerra civil en el bando de Julio César, y estuvo presente en las victorias de Farsalia y Thapsus, pero fue derrotado por Farnaces en el Bósforo, terminando la campaña como gobernador de Asia (48-46), siendo su relación con César tan estrecha que le hizo entrar en el colegio de pontífices (h.45) y le había designado para ser su Magister Equitum en su Dictadura del año 43 (junto a Cayo Octavio), cargo que no pudo ocupar por el asesinato del Dictador. Luego fue partidario de Octavio, estando presente en la batalla de Filipos (42), siendo premiado con su segundo consulado en el 40, aunque antes de terminar su mandato tuvo que dimitir debido a las tormentosas relaciones entre los triunviros. Tras el pacto de Brindisi Octaviano le envió a gobernar Hispania como procónsul (39-37) para sofocar una revuelta de los Ceretanos. Instaló su cuartel general en Osca y derrotó a los rebeldes, siendo aclamado por sus tropas como Imperator (39), motivo por el cual realizó esta acuñación, fue además patrono del municipio de Ampurias. A su vuelta a Roma pudo celebrar el triunfo (ex Hispania, el 17 de julio del 36). Esta extraordinaria moneda nos muestra un anverso de inspiración indígena (piezas de Bolskan), con la leyenda de la ceca con su nombre latino (Osca), y un reverso con los signos de su pertenencia al muy reducido colegio de pontífices y cuyo diseño se inspira en los denarios del elefante de Julio César realizados una década antes. Llaman la atención de esta pieza, en primer lugar sus tipos mixtos, indígenas y romanos, así como la ausencia a su categoría de pontífice, aunque los símbolos del reverso lo muestran bien a las claras, y por último la ausencia de cualquier referencia al triunviro que envió a Calvino a Hispania.
Un áureo, lote 279, de Tito. Áureo. Roma (77-78). A/ Busto laureado a der.; T. CAESAR VESPASIANVS. R/ Annona sentada a izq. con espiga; ANNONA AVG. RIC-218. CH-16. EBC-. Rara. Salió en 6.000 euros y se vendió en 9.000 euros..
Como es habitual en las subastas de Jesús Vico destacan las monedas de los Reinos Suevos y Visigodos, en esta ocasión hay cuatro en concreto que llaman la atención de los posibles compradores. Con el número de lote 381, Tremissis del Reino Suevo. A/ Busto drapeado y diademado a der., delante, U invertida; BOVLIVIVVIIVVLILIEI. R/ Corona lemniscata con cruz griega central, encima estrella, a la izq. L invertida( según Ph. Grierson, quizás León), abajo oIIo. au 1,25g. MEC-291. MBC. Rarísima. Por 3.500 euros de salida, se adjudicó en 5.500 euros.
Otra de las grandes piezas de la subasta pertenece al lote 394, Sisebuto. Tremissis. Saldania. CNV-228 vte. inédita por caras sin facciones, larga melena y busto triangular de un sólo cuerpo. Dos ejemplares conocidos de Sisebuto en esta ceca y único con estas características. EBC+. Se vendió en precio de salida, 10.000 euros.
En la ceca de Saldaña, dice el catálogo de la subasta, apenas acuñaron seis reyes (Leovigildo, Recaredo, Witerico, Sisebuto, Suinthila y Chindasvinto), lo que hay que destacar es que además las monedas de estos soberanos son escasísimas, muchas de ellas únicas (Recaredo, Witerico, Sisebuto, y Chindasvinto) y otras con apenas tres ejemplares conocidos (Leovigildo, Suinthila). En nuestro caso se presenta una nueva pieza, con el tipo de los dos bustos, pero con un diseño muy distinto al conocido de este ceca, donde ha desaparecido la cara de la figura, siendo sustituida por un pequeño triángulo y el pelo se coloca en semicírculo más largo del habitual, pareciéndose más a algunos tipos usados en Gallaecia.
El lote 406 pertenece a Recesvinto. Tremissis. Ispali. CNV-448 vte. de busto. EBC. Rarísima. A puja y remate en 4.500 euros.
De Egica y Witiza sobresalió el lote 415, Tremissis. Egitania. CNV-578.6 mismo ejemplar ilustrado. Fina grieta. MBC. Muy rara. Salida y venta en 5.000 euros.
El lote 481 correspondía a Carlos I, 32 sueldos imperiales. Milán. “Il Burigozzo”. Olivares-Tipo 1 Nº 9. CR-8c. Finas rayitas. MBC+. Muy rara. Por 2.650 euros de salida, se remató en 3.100 euros.
El Ducado de Milán era un territorio perteneciente al Reino de Italia y por tanto feudo del Sacro Imperio Romano Germánico. Como tal lo habían gobernado los Visconti y los Sforza, y era ambicionado por los reyes de Francia como descendientes de los Visconti, por lo cual Carlos V tuvo que defenderlo de sus ambiciones en varias ocasiones. A la muerte del último duque Sforza (Francesco II, 1535), el emperador decidió asumir personalmente el gobierno del ducado, lo cual provocó un nuevo conflicto con Francisco I de Francia. Como soberano del ducado decidió emitir moneda, siempre utilizando su título imperial junto con los símbolos propios del ducado, en especial a su santo patrón, el obispo San Ambrosio. Esta pieza, Denaro da soldi 32 Imperiali, se acuñó a principios de 1539 con un peso de casi 11 gramos (94% de plata), y muestra en anverso el retrato de perfil del emperador con corona de laurel, armadura y Toisón de oro al cuello, mientras el reverso lleva de pie a San Ambrosio, con mitra, nimbado, con báculo y látigo. Ha pasado a la historia numismática con el nombre de Burigozzo, ya que fue Giovan Marco Burigozzo el primero en citarla y describirla en su Crónica, que narra los hechos acaecidos en Milán entre 1500 y 1544. En el siglo XIX los hermanos Gnecchi fueron los primeros en dar su nombre a esta pieza, y lo mismo ocurrió en el CNI, aunque no sabemos el motivo ya que en ningún documento de época se la denomina así. Esta pieza es muy escasa y tiene distintas variantes ligadas a la forma de la corona de laurel y sus adornos.
Ya con los Borbones, el lote 541 correspondió a Fernando VI, 8 escudos. 1759. Nuevo Reino. J. VI-625. Finas rayitas en el anv. y rayas en el rev. R.B.O. EBC-. Precio de salida 1.900 euros y de remate en 2.100 euros.
De Isabel II hay una pequeña pieza, lote 710, maravedí. 1843. Jubia. Sin valor. VI-3. EBC+. Muy rara. Con salida y venta en 1.500 euros.
Más raro aún era el lote 713, 2 maravedís. 1840. Jubia. Marca de ceca: J. VI-8. EBC-/EBC. Falta en casi todas las colecciones. Rarísima. Esta moneda está ausente en la mayoría de las grandes colecciones españolas, y no hay imágenes de la misma en las publicaciones especializadas. Salió a subasta en tan sólo 500 euros y fue vendido en 1.000 euros.
Por lo que se refiere al gran apartado de moneda extranjera, destaca en primer lugar Polonia, lote 951. Alejandro I. 50 zlotych. 1818. IB. C-103. B.O. EBC+. Rara. Salió a puja en 2.000 euros y se fijó la venta en 5.250 euros.
También de Polonia, lote 252. Nicolás I. 25 zlotych. 1829. FH. C-118. R.B.O. EBC-. Muy rara. Salió a subasta en 2.000 euros y se vendió en 7.500 euros.
Tras la definitiva derrota de Napoleón el Congreso de Viena decidió crear un nuevo estado, la llamada Polonia del Congreso, un Reino de Polonia con cierta autonomía cultural y aduanera, una asamblea nobiliaria propia y un pequeño ejército, que aprobó su Constitución en 1815. Ahora bien su soberano sería el Zar de Rusia, que pronto intentó reducir su autonomía, aunque en lo simbólico se mantuvo, como en el caso de las monedas. Así Alejandro I ordenó por un ukase de 19 de noviembre de 1815 la acuñación en Varsovia de las nuevas monedas, que debían llevar su nombre y títulos rusos y polacos en alfabeto latino y lengua polaca (ALEXANDER I CESARZ SA W. ROS KROL POLSKI), mientras en reverso aparecen las armas del nuevo Reino de Polonia, donde su tradicional águila blanca aparece en un manto sobre el águila bicéfala del Imperio Ruso. Todo el sistema monetario creado por Alejandro para Polonia fue mantenido por Nicolás I, aunque con algunas novedades muy significativas en lo tipológico (ordenanzas de 21 de abril y 8 de agosto de 1826), como mantener el retrato del zar difunto en anverso con la leyenda (ALEXANDER I CES ROS WSKRZESICIEL KROLEWSTWA POLSKIEGO 1815, Alejandro I, emperador de Rusia, restaurador del Reino de Polonia, 1815), mientras en reverso la leyenda era NIKOLAY I CES WSZ ROSSYI KROL POLSKI PANNIACY (Nicolás I, emperador de todas las Rusias, rey reinante de Polonia), y eliminar el escudo del nuevo reino para colocar una corona de laurel en cuyo interior aparece el valor de la pieza y la fecha. Todo cambió cuando una revolución polaca intentó destronarle (1831), lo que llevó a la abolición de la constitución polaca (1832).
El lote 970 se ajusta a Rusia y su precio de remate fue el más alto de la subasta. Alejandro III. 10 rublos. 1890. (St. Petersburgo). Y-A42. EBC+. Rara. Su precio de salida era de 2.000 euros y las pujas llevaron a estos 10 rublos oro nada menos que hasta los 46.000 euros.


Por último, una de las mejores piezas de la subasta fue el lote 956, Rusia. Isabel I. 10 rublos. 1756. Moscú. MMA. C-28.1. EBC-. Muy rara. A puja a partir de 17.000 euros, alcanzó la magnífica cifra de 42.000 euros en remate.
Extraordinaria pieza, nos dice el catálogo de la subasta, creada por la emperatriz Isabel Petrovna (1741-1762) en su idea de retirar las antiguas monedas (18 de diciembre de 1741) y occidentalizar aún más el numerario de Rusia. De esta manera un ukase de 12 de noviembre de 1755 crea las dos mayores piezas del sistema, el Imperial (10 rublos oro) y el medio imperial, con una tipología totalmente nueva. En el anverso aparece un retrato de medio cuerpo de la emperatriz, con corona y traje de ceremonia y con la banda de la Orden de San Andrés, rodeada por la leyenda que la denomina por la gracia de Dios Emperatriz y Autócrata de todas las Rusias, mientras el reverso es mucho más novedoso, la tradicional águila bicéfala, emblema tradicional del Imperio, se reduce y ocupa el centro de la moneda, como si fuera el centro de una cruz griega, cuyos brazos son ocupados ahora por los escudos de Moscú (el centro del Imperio), y de Kazán, Siberia y Astrakhan, sus principales anexiones (durante la época de Iván IV), y en los vanos se coloca la fecha de emisión de la moneda. Este diseño de cruz griega heráldica lo hemos visto en piezas inglesas desde el siglo XVII y algunas francesas del XVIII, que sin duda fueron su modelo. En cuanto a la marca de ceca aparece bajo el retrato de la emperatriz, que puede ser San Petersburgo o Moscú, que es la de la pieza que se presenta y que la hace aún más rara.