ND© Un documento histórico excepcional, testimonio de buenos deseos y recuerdo de las peregrinaciones durante la Edad Media. La historia de este objeto es antigua y fascinante.
Los “testimonium” se difundieron en Roma a partir del siglo XII para identificar a los peregrinos durante su viaje, tal como pasaba con las vieiras de Compostela, en el Camino español a Santiago.
Los realizaban los talleres especializados de los “medajari” romanos, fabricantes de medallitas devocionales. Los canónigos de la Basílica Vaticana los distribuían a los peregrinos que los cosían al manto, al bolso o al peculiar sombrero y que los custodiaban como testimonio de su peregrinación.

Plaqueta original medieval y matriz en cera. Archivo y Biblioteca Vaticanas.
En ocasión del Jubileo Extraordinario de la Misericordia, el Vaticano ha autorizado la réplica fiel de esta targa de metal que ha acompañado la vuelta a su país de miles de fieles, cuyo original se halla en los archivos de la Biblioteca Apostólica Vaticana.

La plaqueta, de 36,60 x 30,20 mm. de tamaño, presenta en la cara anterior las figuras en relieve de los Apóstoles San Pedro y San Pablo (tal como escrito en la parte alta, “S. PETRVS S. PAVULUS”, ahora casi ilegible). En la cara posterior, completamente liso en su origen, ha sido grabado el logo de la Biblioteca Apostólica Vaticana, en comprobación y garantía de la autenticidad de la reproducción.
Hoy el Testimonium es el símbolo de la tradición espiritual cristiana y un precioso recuerdo de la Peregrinación, Camino del Alma.

Al Papa Francisco le fue entregado el testimonium por el campeón olímpico Abdom Pamich, un atleta especialista de la marcha 50 Km. cuarenta veces campeón, emblema por excelencia del “camino”. La misma targa fue entregada a Pietro Scidurlo, un joven minusválido desde su nacimiento, que ha recorrido con una bicicleta especial todo el Camino de Santiago antes y la Vía Francigena después.
Más información en www.pilgrimtestimonium.com