Vitrina de la exposición “Virtuti et Merito” conteniendo prueba original uniface de la medalla de Pedro de Sepúlveda, así como troquel y medalla actual en similor.
El 19 de septiembre de 1771, S.M. el rey Carlos III rubricaba con su firma la institución de la “Real y Distinguida Orden Española” que, teniendo como lema “Virtuti et Merito”, nacía con la finalidad de distinguir a aquellas nobles personas que destacaran por sus acciones en beneficio de España y la Real persona. Esta distinguida Orden es una de las creaciones más importantes de su reinado, y su legado llega hasta nuestros días como parte del Patrimonio Histórico inmaterial de todos los españoles.
En esa época, el grabador Pedro González de Sepúlveda quiso aprovechar la ocasión histórica que se le brindaba y, por su cuenta, comenzó a trabajar en el grabado de una medalla que recogiera dicho evento histórico con el fin de mostrar su gran valía con el buril. Pero una vez acuñada una prueba y realizadas las pertinentes gestiones ante la Corte de Carlos III no tuvo el eco esperado y el proyecto de Sepúlveda iniciado en 1778 quedó en el olvido. La medalla nunca fue acuñada por falta de presupuesto, sólo se realizaron pruebas uniface de su anverso y reverso.
La medalla actual está acuñada en similor, tiene un peso de 80 gramos y diámetro de 60 milímetros. La tirada es de tan solo 245 ejemplares.
El anverso muestra una escena de un Capítulo de la Orden en la que el rey Carlos III impone el collar de la misma a un nuevo caballero, que luce el manto ceremonial al igual que el rey y el resto de miembros presentes.
En su reverso aparece la divisa de la Real Orden de Carlos III “Virtvti et Merito” rodeada con el Collar de la misma.
