Cabe destacar que la colección de numismática está formada por 484 monedas de todos los períodos culturales históricos de Baleares -desde el periodo púnico de Ibiza hasta la Guerra civil española-, según ha informado el Consell de Mallorca en una nota de prensa. Por otra parte, el fondo de arte data entre el siglo XVI y hasta la primera mitad del siglo XX.
"Esta declaración hará posible que las dos colecciones no se puedan disgregar y que la administración competente, en este caso el Consell de Mallorca, esté al corriente de su ubicación y tengamos conocimiento de cualquier movimiento previsto", ha explicado el vicepresidente y conseller de Cultura, Patrimonio y Deportes, Francesc Miralles.
Y es que, el conseller insular, ha valorado la colaboración de los propietarios durante el proceso de catalogación llevado a cabo por los técnicos de Patrimonio. Este trabajo ha constatado que las piezas se encuentran en buen estado de conservación, ya que muchas han sido restauradas o tuteladas por la entidad.
La colección de numismática es una muestra de las acuñaciones hechas por la seca de Mallorca, que estuvo en funcionamiento desde Jaime II de Mallorca fina a 1787. También están presentes las acuñaciones hechas durante la Guerra del Francés, así como un conjunto de monedas púnicas y de monedas islámicas acuñadas en Mallorca que corroboran el alto valor documental e histórico del conjunto.
En cuanto a la colección pictórica -formada por más de un centenar de pinturas, dibujos y obra gráfica-, su valor para declarar la BIC radica que en que explica la Mallorca entre el siglo XIX y la primera mitad del XX, sumado a la calidad individual de muchas de las piezas y la representación de figuras y espacios clave en la historia -como el rey Jaume o visiones históricas de la ciudad de Palma-.