
La moneda conmemorativa fue diseñada por el artista orfebre Géza Kertész. En la parte superior, en el centro del anverso se puede ver la leyenda con el nombre del país emisor “Magyarország”, el número de valor nominal “3000” y el nombre de la moneda nacional húngara “Forint” (Forintos) aparece en líneas horizontales superpuestas.En el lado izquierdo de la moneda se muestra la representación de un libro cerrado, con la leyenda “Eötvös József MunkáI” (La obra de József Eötvös). El año de emisión “2013” y la marca de ceca “BP” (Budapest), están situados en el borde inferior derecho de la moneda, dispuestas horizontalmente en dos líneas.

A la izquierda, en el reverso, figura una del busto de Eötvös József. La leyenda “Eötvös József 1813 -1871” está inscrita a la derecha del retrato, en el borde de la moneda, separados por motivos de punto circular. Las representaciones de la escritura y la firma de Eötvös József se colocan en el fondo del retrato. Las iniciales del diseñador Géza Kertész están a la derecha del retrato, en el borde de la moneda.

Conocido como el primer gran maestro de la novela realista de Hungría, József Eötvös fue un escritor, poeta, abogado, político y estadista reforma. Su vida y obra se dedicaron a promover pacíficamente el progreso de la nación húngara.
El Barón Joséf Eötvös de Vásárosnamény (Buda, 13 de septiembre de 1813 - Pest, 2 de febrero de 1871), tras recibir una esmerada educación, ingresó en el servicio civil como vice-notario, y pronto fue introducido en los ambientes políticos de Hungría por su padre. Pasó bastantes años en Europa Occidental, asimilando las nuevas ideas literarias y políticas, y conociendo personalmente a los principales representantes del Romanticismo. A su vuelta a Hungría escribió su primera obra política, e impresionó favorablemente a la dieta por su elocuencia y sabiduría. Uno de sus primeros discursos -publicado junto con otros materiales en 1841 abogaba apasionadamente por la emancipación de los judíos.
A partir de ese momento, Eötvös siguió publicando sus ideales políticos en el periódico Pesti Hírlap, partiendo del principio de que las reformas que Hungría necesitaba sólo podrían llevarse a cabo si existía un gobierno verdaderamente nacional. Estas mismas ideas se manifiestan en su novela El notario del pueblo (1844-1846), una de las obras clásicas de la literatura húngara, así como en la menos notable Hungría en 1514, o en la comedia ¡Viva la Igualdad!. En 1842 se casó con Anna Rosti, hija de Adalbert Rosti, con la que llevó una vida apacible.

En esta época Eötvös era ya considerado como uno de los principales escritores y políticos de Hungría. La Revolución Húngara de 1848 supuso la puesta en práctica de gran parte de las ideas defendidas por Eötvos, que estuvo a cargo del ministerio de educación y religión pública, en el primer ministerio responsable de Hungría. Su influencia sin embargo iba más allá de esta área: él, junto con Ferenc Deák y István Széchenyi, representaba la tendencia pacífica y moderada dentro del consejo de ministros. Cuando el presidente Luis Batthyány, dimitió, Eötvös, desilusionado, se exilió durante una temporada en Múnich durante la turbulenta época de la Guerra de Independencia.

A su vuelta a casa en 1851, Eötvös se mantuvo al margen de los movimientos políticos. En 1859 publicó Garantías del Poder y la Unidad de Austria, en el que intentaba alcanzar un equilibrio entre unión personal y responsabilidad ministerial, por un lado, y centralización política, por otro. Tras la guerra italiana, sin embargo, este punto medio fue considerado insuficiente por la mayoría de los húngaros, de manera que en la dieta de 1861 Eötvös fue uno de los más fieles seguidores de Deák.

La calma tensa que prevaleció durante los años siguientes le permitieron dedicarse a la literatura y, en 1866 fue elegido presidente de la Academia Húngara. Tras la firma del Compromiso Austrohúngaro de 1867, Eötvös formó parte del gobierno de Gyula Andrássy como ministro de educación y religión pública, convirtiéndose así en el único en repetir cartera en 1848 y 1867. Esto supuso para József la oportunidad de poner por fin en práctica los ideales defendidos a lo largo de su vida: por ejemplo, ese mismo año la dieta aprobó una ley de emancipación de los judíos, aunque el resto de sus medidas por la libertad religiosa fueron menos exitosas, debido a la oposición de los católicos. Su mayor logro, sin embargo, fue la promulgación de la Ley de Escuelas Nacionales, el sistema de educación público más avanzado del país desde los tiempos de la María Teresa I. Sus responsabilidades y obligaciones fueron sin embargo excesivas para su frágil salud, y murió en Pest el 2 de febrero de 1871.